Viviendas inclusivas y resilientes
Hábitat para la Humanidad recomienda viviendas inclusivas y resilientes en la conferencia sobre cambio climático de la COP26
Hábitat para la Humanidad Internacional hace un llamado a los delegados en la principal conferencia mundial sobre cambio climático, para garantizar que los esfuerzos en reducir las emisiones de carbono no aumenten el costo de la vivienda y, a la vez, para ayudar a las familias más vulnerables a adaptar sus viviendas de forma que resistan el aumento del nivel del mar, las temperaturas extremas y los fenómenos meteorológicos cada vez más intensos.
“Reducir las emisiones de carbono asociadas con el sector residencial es fundamental y debemos hacerlo de manera que no exacerbemos la crisis global: la enorme brecha en viviendas adecuadas y asequibles. La crisis climática y habitacional están interconectadas. No se pueden resolver de forma aislada, sino mediante esfuerzos holísticos que prioricen las necesidades de las familias más vulnerables ante el cambio climático”.— Patrick Canagasingham, director de Operaciones de Hábitat para la Humanidad Internacional
La 26ª Conferencia de las Partes (COP26) es la última de una serie de reuniones de las Naciones Unidas para países firmantes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. La COP26, que se inauguró el domingo y se extenderá hasta el 11 de noviembre en Glasgow, Escocia, es la primera conferencia de este tipo en la que Hábitat para la Humanidad Internacional participa de manera oficial.
Hábitat publicó una lista de compromisos y recomendaciones para la COP26, en la cual solicita a la ONU, a los bancos multilaterales de desarrollo y a los gobiernos donantes, que promuevan las inversiones en renovación y mejoramiento de viviendas, a la vez que se limitan las emisiones de carbono generadas por nuevas construcciones. Los anteriores, junto con todos los gobiernos y actores del sector de vivienda, deberían enfocarse en los más de mil millones de personas que residen en asentamientos informales, para ayudarlas en su adaptación al cambio climático.
Esto significa, por ejemplo, priorizar los mecanismos de financiamiento para las familias con bajos ingresos que suelen no tener acceso a préstamos para mejorar sus hogares y hacerlos más resilientes ante el aumento del nivel del mar, las sequías, las inundaciones, las olas de calor y los fenómenos meteorológicos agravados por el cambio climático.
A principios de este año, Hábitat estableció una posición oficial de la organización sobre vivienda y cambio climático que reconoce una oportunidad especial para que el sector de la construcción reduzca su huella de carbono, la cual representa de forma directa e indirecta, el 38 % de las emisiones de carbono relacionadas con la energía a nivel mundial.
Hábitat tiene docenas de proyectos en todo el mundo que incluyen mitigación o adaptación al cambio climático. Por ejemplo, específicamente en América Latina y el Caribe, en República Dominicana Hábitat construye viviendas que se caracterizan por ser edificadas con bloques y madera creada con plástico reciclado, lo que hace que se reduzcan las emisiones de CO2, así como el consumo de agua y energía. También, brinda ventajas térmicas, ya que este tipo de materiales concentra menos el calor dentro del hogar.
En El Salvador, Hábitat ha trabajado con aliados para construir viviendas bioclimáticas que optimicen el clima y la vegetación para lograr eficiencia energética y resiliencia. Y por otro lado en Paraguay, la organización ayuda a vecindarios a evaluar los riesgos climáticos.